Aprender... a perder

 El título de este artículo, es el mismo que el de un curso que hace tiempo y tras una buena comida, me aventuré a bautizar con uno de mis Maestros. 

Como hoy solo dispongo de unas pocas líneas, os diré que la teoría corre a cargo de los doctores en psicología y el aprendiz se encarga de la práctica (vamos lo mismo que pasaba en mis asignaturas de la carrera :-). Pero ojo, ya os avanzo que no se trata de una práctica convencional, se trata de una práctica singular con forma de juego de cartas, y hasta aquí puedo leer…

Lo dicho, hoy  no podréis jugar conmigo, así que tienes mi permiso para dedicar los siguientes 4 minutos a otra actividad más divertida, o arriesgaros a abrir un libro sobre teoría de juegos.

Si habéis llegado hasta aquí, espero que no os importe que os etiqueten como personas curiosas. Pues bien, ya que nos hemos quedado a solas, os contaré un secreto, de esos que se dicen en voz baja, el verdadero título de este escrito debería ser “aprender a aprender”, pero que queréis que os diga, utilizar el concepto de "derrota" me pareció más épico…

Ahora que os he desvelado mi secreto, creo que es de justicia daros una explicación sencilla y rápida a la pregunta de “¿Cómo aprendemos las personas?”

Aquí mi respuesta rápida, es a lo animal: lo que viene a ser por imitación y repetición!!

Para aquellos curiosos que os hayáis quedado con ganas de racionalizar o complicar más esta sencilla explicación, os recomiendo que escuchéis alguno de los fantásticos podcasts del revolucionario Marcos Vázquez, en concreto el capítulo “Aprende mejor”

En ese audio, de manera más científica, explica a través de 3 ideas clave como se descompone este complejo mecanismo que es nuestro modelo de aprendizaje:

  1. CODIFICAR. Lo que viene a ser entender. Aptitud especialmente útil para traductores, intérpretes y profesores de idiomas, aquí yo recomiendo añadir una buena dosis de reflexión.

  2. ALMACENAR. Lo que viene a ser memorizar. Aquí, si no lo conocéis os recomiendo indagar un poco más sobre el “efecto Mateo”.

  3. RECUPERAR. Lo que viene a ser recordar. Y es que dicen que la memoria es selectiva, aquí os recomiendo usar la evocación.

Y eso es todo curiosos, como me dijo una vez una CaMpeona:

“No tengas miedo a perder, porque así es como se aprende a ganar”


firmado: un eterno aprendiz

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Por qué le llaman CORRER, cuando quieren decir EMPRENDER?

Pater...

Hola, soy el Sr. Lobo, soluciono problemas…